Ingredientes
300 g de harina de fuerza
6 g de sal
6 g de levadura fresca
75 ml de agua tibia
1 yogur natural
40 gr de mantequilla derretida (o aceite de oliva) y un poco más para el reposo
1. Diluir la levadura en el agua y dejar que se active durante unos 10 minutos. Añadir la harina y la sal mezcladas y el yogur, amasando hasta obtener una masa homogénea y elástica. Hacer el primer levado en un bol untado con un poco de aceite, tapado con un trapo húmedo y al abrigo de corrientes de aire hasta que doble su volumen.
2. Desgasar la masa –amasándola un poco– y dividirla en 4 partes. Darles forma de bola y, sobre una superfície lisa enharinada y con la ayuda de un rodillo, darle forma redondeada u ovalada (y del tamaño de un plato, más o menos). Dejar levar unos 20 minutos antes de hacerlos.
3. En una sartén muy caliente, poner –de uno en uno– los panes pincelados con los dos lados con aceite o mantequilla. Cuando la masa empiece a hacer burbujas, es el momento de darles la vuelta. Si no se van a consumir inmediatamente, envolverlos en un paño para que no se sequen.
Para el paté de anacardos
Ingredientes
100 g de anacardos crudos
1 cucharadita de pasta de curry
1 cucharada de zumo de limón
1 cucharadita de Marmite o levadura nutricional (opcional)
1 cucharada de cebollino picado
Sal al gusto
150 ml de agua o leche vegetal sin endulzar
1. Remojar los anacardos en agua entre 3 y 8 horas. Este paso es opcional, y se puede solventar añadiendo más agua durante el proceso, pero la textura mejora con el remojo.
2. Ponerlos en una batidora o robot de cocina con el resto de ingredientes menos el cebollino y el agua o la leche vegetal. Añadir esta última poco a poco (seguramente no hará falta toda) hasta conseguir la textura deseada.
3. Rectificar de sal y añadir el cebollino picado, mezclando con un tenedor. Reservar.
Para la ensalada crujiente
Ingredientes
1 remolacha mediana
150 g de calabaza sin piel
1 cebolleta
1 bulbo pequeño de hinojo
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de zumo de lima
Sal
Pimienta
1. Eliminar la capa externa de la cebolleta y la parte más dura del hinojo y pelar la remolacha. Cortar todas las verduras a daditos o rallarlas, aliñarlas con el aceite, el zumo de lima, sal, pimienta y las hojitas tiernas del hinojo.
Montar el plato poniendo el naan como base, untando encima un poco de paté y terminando con la ensalada crujiente. Para comerlo cómodamente, lo mejor es enrollarlo, y a disfrutar.