El Real Madrid se lleva a cara o cruz en la prórroga un apasionante clásico (2-3)
El Real Madrid selló este miércoles su presencia en la final de la Supercopa de España que se está celebrando en Arabia Saudí al superar en la prórroga (2-3) a un Barça que contra pronóstico llegó a tutear a un equipo madridista que se adelantó dos veces en el marcador y que tuvo una vez más a Vinicius, Benzema y Modric como jugadores desequilibrantes. Con un gran derroche físico en ambos equipos, el cuadro azulgrana tomó riesgos en la prórroga fiel a su idiosincrasia, adueñándose del balón pero desguarneciendo la defensa, y lo pagó caro. El conjunto de Ancelotti espera rival para la final del domingo, con el Atlético y el Athletic como candidatos.
Semifinal de la Supercopa entre el Real Madrid y el Barcelona
Había dudas con respecto a la alineación por la que apostarían Xavi y Ancelotti. El técnico catalán decidió arriesgar con Araujo, su mejor central, pese a haber sido operado hacía seis días en los dedos de una mano, y por la experiencia de Alves, aun a riesgo de que sus 38 años le pudieran pasar factura ante la velocidad de Vinicius. Y decidió que Ferran Torres, tras su negativo en coronavirus del martes, vistiera ya por vez primera la elástica azulgrana.
El entrenador italiano tuvo que encontrar un sustituto para Alaba, lesionado en el calentamiento, y apostó por Nacho. Carvajal fue el elegido en el lateral pese a que regresaba tras una lesión. Y en el ataque, premió a Asensio tras sus buenas actuaciones recientes aunque en la rueda de previa había insinuado el día anterior que sopesaba dar entrada en su lugar a Rodrygo, más descansado.
El dominio del balón fue alterno en los primeros minutos, aunque Benzema y Asensio, con dos disparos que salieron demasiado alto fueron los primeros en avisar. Y Vinicius, el primero en 'probar' al portero contrario. Dani Alves, con un potente lanzamiento que salió a córner tras rebotar en Modric, fue el primero en intentarlo en el lado de los de Xavi.
La primera ocasión clara que saldrá en los resúmenes televisivos llegó en el minuto 18. Con Vinicius rompiendo la defensa rival por velocidad, Asensio no aprovechó en el área de Ter Stegen el servicio del brasileño. Vinicius, por la izquierda, era el principal arma madridista. Dembélé, en el extremo izquierdo del ataque azulgrana, era el más buscado por sus compañeros aunque su protagonismo era mucho menor que el del exdelantero del Flamengo.
Y el que más lo buscó fue el que lo encontró. El gol. Busquets se durmió al salir con el balón controlado y un avispado Benzema robó el balón el mediocentro barcelonista para asistir a Vinicius en carrera. El brasileño, por alto, definió ante Ter Stegen.
El Barça había sido inferior hasta el momento, pero despertó con dos remates de cabeza de Luuk de Jong. Fueron centrados y atrapados por Courtois, pero al menos sumaban las dos primeras ocasiones en la nómina de su equipo.
Al Barcelona le costaba crear ocasiones y el Real Madrid daba sensación de peligro al recuperar y salir en desbandada, pero cuando parecía que los de Ancelotti tenían el partido controlado, llegó el empate de Luuk de Jong. Cuando un delantero está en racha, marca hasta de rebote, y así llegó la igualada. Con un despeje de Militao que rebotó en el neerlandés y batió a Courtois. Porque Luuk de Jong, desde que le han instado a hacer las maletas, ha marcado al Granada, al Mallorca, y ha dejado en la retina de los aficionados remates de chilena, de espuela... Parece que el 'nueve' estaba en casa. El Madrid había sido mejor, pero la primera semifinal de la Supercopa llegaba igualada al descanso.
El Barça manda tras la reanudación
Pedri y Ez Abde sustituyeron a Frenkie de Jong y Ferran Torres al descanso en los de Xavi y Ancelotti mantuvo su once en el césped. El Barcelona saltó más decidido que en la primera parte. Se adueñó del balón sin complejos y sin miedo a que el rival pudiera hacerle daño si recuperaba el balón. Y los primeros minutos sólo tuvieron color azulgrana.
Pedri, con un disparo cruzado que salió fuera por poco, Dembélé, con un lanzamiento que que también salió fuera, y Luuk de Jong, al tratar de desviar un centro chut del francés, fueron los protagonistas de las primeras acciones de peligro ante un Real Madrid dormido.
A los veinte minutos del segundo parcial, el partido ya no tenía dominador. El Barça había dado un paso hacia atrás. O el Real Madrid le había obligado. La cuestión es que el Real Madrid no quiso ya que sus bazas se limitaran al contragolpe y puso empeño también en mover el balón con paciencia. Ansu Fati entró por Luuk de Jong en el Barça y Rodrygo a Asensio en el equipo blanco.
Benzema, tras una gran acción en el área, revolviéndose entre varios rivales, estuvo a punto de adelantar a su equipo en el ecuador del segundo período, pero el chut del francés salió repelido por el poste derecho de la portería de Ter Stegen. Benzema rozó el gol sin lograrlo, pero a la siguiente sí lo consiguió. La jugada se gestó en la parte izquierda del ataque madridista, con Mendy desbordando a Dani Alves y centrando al área. El remate de Benzema fue rechazado por Ter Stegen, pero Carvajal, al rechace, centró desde la parte derecha para que el delantero lionés rematara en boca de gol.
Valverde sustituyó a Modric para dar aire al Real Madrid en un centro del campo que parecía agotado, pero Ansu Fati, con un remate de cabeza tras un buen centro de un incansable Jordi Alba, devolvió las tablas al marcador. Restaban sólo ocho minutos para el final. El público de Riad, de mayoría madridista, se frotaba las manos pensando en más fútbol. Y el Atlético y el Athletic, semifinalistas este jueves, también.
El Real Madrid 'mata' en una contra
El Barça llegó más enteros a los minutos finales mientras el Real Madrid parecía tener sólo un plan: balones largos para que corran Vinicius y Rodrygo. Llegaba la prórroga. Pero el Barcelona, que había llegado a Riad denostado, tenía motivos para sonreír. Sucediera lo que sucediera había tuteado al Real Madrid. Con victoria o sin ella regresaría a la Ciudad Condal con la cabeza alta y un chute de optimismo para la Liga.
El Real Madrid contaba con más cambios disponibles ante un Barça que ya había sacado toda su artillería de recambio. Y Lucas Vázquez inició la prórroga en el lugar de Nacho. El guión en el tiempo extra fue muy claro, el mismo que en gran parte del segundo período. El Barça monopolizaba la posesión del balón. Y el Real Madrid, agazapado, lo intentaría a la contra. La sensación de dominio barcelonista se rompió en la primera opción madridista, con cinco jugadores blancos atacando y tres azulgranas defendiendo. Casemiro asistió a Rodrygo en en la posición de extremo derecho, el centro del brasileño lo dejó pasar Vinicus y Valverde no perdonó en boca de gol. El uruguayo, en la clásica acción incomprensible que estamos acostumbrados a ver, se quitó la camiseta para mostrar su dorsal y vio la correspondiente cartulina amarilla, quedándose mermado para los veinte minutos de prórroga que restaban. Afortunadamente para su equipo, la acción no le pasó factura.
Abde, que poco después fue sustituido por Jutglá pese a que había saltado al campo en la segunda parte, se acercó al gol con un disparo cruzado que salió fuera por pocos centímetros en la primera oportunidad del tiempo extra. Y Camavinga reforzó el centro del campo madridista en lugar de un acalambrado Vinicius, el mejor del partido, y otra vez decisivo.
El Barça lo intentó hasta el final, con más ganas que ideas y fuerzas, pero el Real Madrid resistió muy ordenado y sin conceder opciones salvo una chilena que falló Dembélé en boca de gol. Rodrygo, solo ante Ter Stegen en un contragolpe, también desperdició su ocasión chutando fuera con todo a favor. No hubo tiempo para más en un partido en el que los dos acabaron extenuados. Un partido en el que cada uno con sus armas, creó ocasiones de gol sin especular. Que refuerza a un Ancelotti que en su anterior etapa ya había ganado en la prórroga una final de Champions al Atlético y una de Copa al Barça. Que el Barça pudo ser mejor como bloque. Pero en el que Modric, Vinicius y Benzema, al vestir de blanco, desequilibraron la balanza. Y un partido en el que el Real Madrid celebra su pase a la final ante el eterno rival pero del Barça sale anímicamente fortalecido para futuras empresas.
FC BARCELONA, 2 - 3 REAL MADRID (1-1, al descanso)
FC BARCELONA: Ter Stegen; Alves (Nico, min.78), Araujo, Piqué, Jordi Alba; Busquets, Gavi (Memphis, min.78), F.de Jong (Pedri, min.46); Ferran Torres (Ez Abde, min.46 (Jutglà, min.110)), Dembélé y L.de Jong (Ansu Fati, min.66).
REAL MADRID: Courtois; Carvajal (Lucas Vázquez, min.91), Militao, Nacho, Mendy; Kroos, Casemiro, Modric (Valverde, min.83); Asensio (Rodrygo, min.68), Benzema y Vinicius (Camavinga, min.110).
GOLES: 0-1, min.25, Vinicius. 1-1, min.42, L.de Jong. 1-2, min.72, Benzema. 2-2, min.83, Ansu Fati. 2-3, min.98, Valverde.
ÁRBITRO: Munuera Montero (C. Andaluz). Amonestó con tarjeta amarilla a Ferran Torres (min.23) y Alves (min.51) en el FC Barcelona; y a Casemiro (min.75) y Valverde (min.99) en el Real Madrid.
ESTADIO: Estadio Internacional Rey Fahd.
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