Las puertas de madera atacada por la humedad, y las sucesivas dilataciones y contracciones, que terminaron por agrietarla, puede repararse con masilla para madera y pintura.
Reparación de puertas de madera
La elección de la masilla debe estar de acuerdo con el tipo de madera que tengamos, y con el tratamiento que le daremos.
Para maderas que serán pintadas, debo emplear una masilla que pueda ser pintada. Para maderas barnizadas, es recomendable utilizar masillas del color de la madera, ya que el barniz deja transparentar el color y la textura de la base.
Es conveniente lijar la superficie de la puerta, ya sea la zona a reparar, o la totalidad de la misma, eso depende de la facilidad que se tenga para realizar la reparación. Luego se pinta lo reparado o toda la puerta, según el caso.
Procedimiento:
Lijar la superficie de la puertas de madera. Rellenar las grietas con la masilla para madera (puede hacerse en capas, para que el hueco quede bien relleno). La espátula facilita la aplicación Luego se lija la masilla para dejar la superficie lisa y sin excesos. Con un paño limpio, se retira todo rastro de polvo, para que no evite la adherencia de la pintura.
La masilla para madera permite, en caso de que la puerta presente relieves, que éstos sean reproducidos, moldeándolos con las manos. El secado de la masilla es de al menos 24 horas.
El pintado se realiza de acuerdo al acabado deseado, ya sea pintura de colores, o barnizado.
Actualmente existen esmaltes al agua, los cuales permiten una aplicación fácil y más higiénica, ya que las manchas se eliminan fácilmente. Basta con aplicar dos manos de pintura.
En el caso del barniz, debemos lijar toda la puerta para que no queden escalones en el barniz. También es conveniente aplicar dos manos.