El expiloto italiano Fausto Gresini, director del equipo Gresini Racing de MotoGP, falleció este martes a los 60 años en un hospital de Bolonia como consecuencia de una infección por coronavirus, según ha informado su equipo.
“La noticia que nunca habríamos querido dar y que nos cuesta escribir. Después de prácticamente dos meses de lucha contra la covid, Fausto Gresini nos ha dejado con 60 años recién cumplidos”, ha comunicado el equipo Gresini Racing. “Todo el Gresini Racing se pone a disposición de su familia, su mujer Nadia y sus hijos Lorenzo, Luca, Alice y Agnese, así como de las innumerables personas que han tenido la oportunidad de conocerlo y de apreciarlo”, finaliza el comunicado.
Gresini se encontraba hospitalizado en Bolonia desde el pasado diciembre por una severa insuficiencia respiratoria y estaba en estado crítico en los últimos días, según se informó el pasado 18 de febrero desde el centro sanitario.
El excampeón del mundo de 125 c.c (1985 y 87) había dado positivo en covid-19 poco antes de las vacaciones navideñas y, tras pasar un periodo inicial de aislamiento en su domicilio, ingresó el 27 de diciembre en el hospital Santa Maria della Scaletta, en Imola.
Pocos días después fue trasladado al centro especializado Maggiore Carlo Alberto Pizzardi de Bolonia, donde ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos con niveles muy bajos de saturación de oxígeno en la sangre, fue inducido a un coma farmacológico y recibió una intubación endotraqueal para ayudar a la oxigenación de los órganos, según se informó entonces.
A pesar de que este lunes diversos medios informaron de su fallecimiento, su equipo desmintió una noticia que sí se ha producido este martes, al no mejorar el delicado estado de salud del expiloto italiano.
En su exitosa carrera, Gresini fundó su propio equipo en 1997 y conquistó el título mundial de Moto2 en 2010 con el español Toni Elías. En MotoGP logró sus mejores resultados en 2004 y en 2005, cuando acabó segundo y tercero con el español Sete Gibernau, el estadounidense Colin Edwards y Marco Melandri.
Descanse en Paz