Los goles de Griezmann y Saúl resuelven un derbi que permiten a los de Simeone seguir vivos en la competición pese a las bajas por lesión
La soleada tarde en el Metropolitano no fue más que otra muestra de que el Atlético de Madrid entiende las desgracias como desafíos. Diezmado por las bajas, las últimas las de un Correa sancionado y un Koke fuera de combate por una lesión muscular, los de Simeone demostraron que pueden estar magullados hasta las cejas pero nunca rotos. Y es que congregar a once futbolistas de la primera plantilla se ha convertido en todo un reto. Las cuentas revelan que llevan más lesiones (33) que partidos oficiales disputados (32) esta temporada pero no más puntos. 44 en LaLiga para ser más precisos, cota alcanzada tras vencer a un irreconocible Getafe (2-0) que le permite seguir la estela del Barça por el título liguero. La conclusión es que este enfermo sigue muy vivo pese a todo.
Sin Koke Resurrección en la sala de mandos, el juego del Atlético de Madrid con el balón en los pies se vulgariza por momentos. Consciente de este grave problema que arrastra desde hace tiempo, Bordalás pensó que la mejor opción de incomodar a su rival era tejer una telaraña en la medular que dificultase al Atlético en la zona de tres cuartos de campo. El Getafe no presionó arriba la salida de balón de los centrales y, por el contrario, se juntó por dentro para obligar a su rival a buscar a Kalinic con desplazamientos en largo. Renunció el conjunto azulón al hambre que mejor le ha caracterizado esta temporada y se replegó ante un Atlético que fue picando piedra con el paso de los minutos.
Y fue en esos instantes, mientras los locales buscaban su mejor versión y el Getafe andaba en la indecisión de elegir si competir o negociar las fuerzas pensando en la Copa del Rey, cuando Thomas Partey arregló un desaguisado en un balón perdido, batiendo líneas con un regate y encontrando el desmarque de un Griezmann que hasta el momento había pasado desapercibido. Djené se quedó colgado tras un desajuste y no pudo llegar a tapar el potente disparo con la pierna izquierda que se coló por el palo corto de David Soria.
La diana de ‘El Principito’, la décima de la temporada, sentenció a un Getafe que empezó a guardar la ropa. Mientras Jorge Molina bajaba balones para dar oxígeno a su equipo y Ángel Rodríguez buscaba sin éxito las carreras cayendo a las bandas, el Atlético empezó a traducir su dominio. Tras una larga combinación de pases, Rodrigo abrió hacia la izquierda ante la proyección de Lucas Hernández, que la puso al punto de penalti para que Kalinic la estrellara contra el pecho de David Soria y Saúl Ñíguez cazara el rechace para hacer el 2-0. En apenas dos disparos a portería, los colchoneros fueron 100% efectivos para cerrar otro derbi a su favor.
El paso por los vestuarios fue toda una declaración de intenciones de lo que serían los últimos 45 minutos, con Bordalás concediendo descanso a Jorge Molina pensando en el Valencia. En los duelos contra el Atlético, el Getafe vive atrapado desde hace muchos años en un verso de Sabina (“y la vida siguió como siguen las cosas que no tienen mucho sentido”), lo que provocó que Simeone acrecentase una estadística que sonroja en la zona sur de la Comunidad de Madrid: los azulones suman 13 partidos seguidos sin marcar un gol al Atlético en LaLiga, un dato que no ha podido dar por terminado tras tirar solamente dos veces a Oblak en noventa minutos.
Hubo tiempo, eso sí, para que Simeone siga construyendo el futuro desde el mismo presente. Con el Getafe bajando los brazos, el ‘Cholo’ dio más minutos de juego a Víctor Mollejo tras debutar en El Alcoraz contra el Huesca, siendo uno de los cinco canteranos que ocuparon el banquillo al inicio del partido. El de La Villa de Don Fadrique dejó destellos de lo que está por venir y se atrevió, incluso, a probar la consistencia de David Soria con un fortísimo latigazo que se marchó fuera por poco.
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Tema: Atlético de Madrid 2-0 Getafe: La candidatura en LaLiga sigue en pie (Leído 148 veces)