PARA DAR GRACIAS EN LOS HILOS PASAR POR AQUÍ, EL RESTO SERÁ BORRADO
*

"Pollo al ajillo"

Iniciado Por Alfonsozgz, El día 03 de Abril de 2017, 22:21:29 22:21



Autor Tema: Pollo al ajillo  (Leído 387 veces)

0 Usuarios y 1 Visitante están viendo este tema.

  • USUARIO NIVEL2
  • ***
  • Panel de agradecimientos
  • -Tu has dado: 73
  • -Tu has recibido: 54
  • Mensajes: 845
  • es
  • Sexo: Masculino
Pollo al ajillo
« en: 03 de Abril de 2017, 22:21:29 22:21 »

Ingredientes para Pollo al ajillo

    1 pollo troceado (1,5 kg.)
    8 dientes de ajo
    1 hoja de laurel
    300 ml. vino de Jerez o de un vino blanco de mi tierra, Ourense
    Hierbas aromáticas: 1 ramita de romero fresco y tomillo (al gusto)
    75 ml. de aceite de oliva virgen extra Abril Selección
    Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)
    Para decorar le irá bien un poco de perejil o cilantro fresco picado (opcional)

Cómo preparar pollo al ajillo, un clásico dentro de la cocina tradicional española, tanto es así que raro es el bar o restaurante que no cuenta con este plato en su carta, bien como tapa o como sugerencia en la mesa.

El pollo es el ingrediente estrella, aromatizado con hierbas y, cómo no, con ajo. En el blog tenéis un montón de recetas de pollo, soy el fan número uno de este tipo de recetas, la mayoría son muy sencillas y sobre todo baratas. Quizás esta receta con pollo es una de las más visitadas junto con el pollo al horno con patatas.

El pollo debe tener un color uniforme, blanco o ligeramente amarillento, sin manchas, lo que será indicativo de una pieza fresca. Se trata de una carne baja en grasa, de gran valor nutricional. Muy fácil de digerir y que además se puede preparar de mil maneras.

Como veis tenemos en esta receta un par de ingredientes muy saludables, os animo a prepararla ya que, además de muy sencilla y rápida, estoy seguro de que os enganchará. Ya me contaréis.
Preparación del pollo guisado al ajillo

    Lo primero que hacemos al comprar el pollo es pedirle al carnicero que nos lo trocee. Ya en casa limpiamos bien los trozos de restos de grasa y les retiramos la piel salvo a las alitas.
    Eliminar la piel es opcional, pero considero que añade al plato un exceso de grasa innecesaria.
    Salpimentamos los trozos ligeramente.
    En una cazuela ancha ponemos a calentar abundante aceite de oliva y echamos los ajos sin pelar.
    Los cocinamos a fuego medio, estando pendientes de que no se nos quemen. La idea es que queden caramelizados y que sirvan de aromatizante de nuestro aceite. Cuando vemos que están blanditos tras unos 5 minutos, los retiramos y reservamos.
    Añadimos los trozos de pollo a la cazuela con el aceite aromatizado de los ajos, junto con la hojita de laurel, la rama de romero y el tomillo.
    El pollo debe de quedar bien frito, lo cual nos llevará unos 15 a 20 minutos por lo menos. Tenemos que estar pendientes de darle la vuelva a los trozos de vez en cuando para procurar que quede tostadito por todas partes.
    No se trata simplemente de dorarlo y sellarlo como cuando lo preparamos para un guiso. Lo que queremos es que el pollo quede perfectamente cocinado y tierno por dentro y tostadito por fuera.

Preparación final del pollo al ajillo

    Cuando vemos que nuestra carne está casi lista retiramos el exceso de aceite, añadimos de nuevo los ajos que tenemos reservados y agregamos el vino.
    Seguimos cocinando la carne hasta que el vino se haya reducido casi por completo.
    Si no tenemos vino de Jerez podemos emplear perfectamente cualquier otro vino blanco de calidad que tengamos por casa. Un Albariño, un Godello… el Jerez le da un toque particular, pero con cualquiera de estos quedará estupendamente.
    La guarnición para acompañar este plato puede ser una simple ensalada mixta. También le van genial las patatas panaderas, unas patatas fritas, unos champiñones, arroz blanco o un puré de patatas.
    Las patatas al microondas que hemos preparado ya varias veces en el blog le van también como anillo al dedo. Una idea de acompañamiento casi sin grasa, una buena opción.
    Servimos calentito en la mesa con un poco de perejil picado por encima o cilantro. Sólo nos queda disfrutar de este auténtico “platazo