La madrugada del próximo domingo, 25 de octubre, finalizará el horario de verano, por lo que los relojes deberán retrasarse una hora, de forma que a las 3 de la madrugada volverán a ser las 2 horas.
Esta medida se produce en cumplimiento de la directiva comunitaria que rige el cambio de hora y que afecta a todos los países miembros de la Unión Europea, recordó el Ministerio de Industria, Energía y Turismo en una nota.
Según esta directiva, el último fin de semana de octubre arranca el horario de invierno, retrasándose la hora, con lo que anochece antes, mientras que en el último domingo de marzo se inicia el de verano, en el que la hora se adelanta y se logran tardes más largas.