Ingredientes
2 pichones
una nuez mantequilla
aove, sal, pimienta
Para el chutney de membrillo:
1 membrillo
una hoja laurel
1 diente ajo
½ vaina cayena
100 g azúcar moscovado
2 clavos
unas hojas tomillo
unas hojas romero
40 ml. vinagre de jerez
Para el caldo de pichón:
3 chalotas
2 carcasas de pichón
1 hoja laurel
1 limón
unas bolas pimienta en grano
500 ml. caldo de cocido
Preparación
El chutney de membrillo. Pelar y cortar el membrillo a daditos y ponerlo en una olla junto con el laurel, ajo picado, cayena, tomillo, azúcar moscovado, vinagre de Jerez, clavo y romero. Mojar con un poco de agua y cocer unos 40-45 minutos. Ir removiendo y añadiendo agua si se seca el chutney. Retirar el laurel y el clavo y rociar con un chorro de aceite de oliva.
El caldo de pichón. Dorar bien las carcasas de pichón cortadas. Incorporar un diente de ajo entero, pimienta en grano y el laurel. Rehogar y añadir la chalota a dados, piel de limón. Mojar con un poco de caldo de cocido (caldo corto) y cocer unos 20-25 minutos. Desengrasar de vez en cuando. Una vez hecho el caldo, colar y reducir.
El pichón. Marcar las pechugas de pichón por la parte de la piel, las alitas y los muslos en la cazuela con un poco de aceite. Añadir la mantequilla, ir regando la carne y a acabar de dorar. Retirar y escalopar las pechugas. Añadir los jugos de dorar la carne al caldo reducido y mezclar bien.
Servir el chutney en la base del plato, encima las pechugas escalopadas, los muslos y las alitas y terminar con la salsa reducida y unas hierbas picadas.