Nº de Personas: 4
Ingredientes:
2 solomillos de cerdo
1 calabacín grande
150 g de queso de cabra en rulo
40 g de arándanos rojos
½ guindilla
2 c.s. de aceite de oliva virgen
sal y pimienta negra
Preparación:
Cortar los solomillos en filetitos de 1,5 cm de grosor y marcarlos en una sartén con el aceite durante 2 min por cada lado. Retirar, salpimentar y reservar. Cortar el calabacín en rodajas del mismo grosor y dorarlas por las dos caras en la misma sartén. Encender el grill del horno a máxima temperatura. Cortar en rodajas de 1 cm de grosor el queso de cabra. Retirar el tallo y las semillas a la guindilla y picarla. Colocar los filetitos en una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado, poner encima de cada uno una rodaja de calabacín y, sobre ella, una de queso y gratinar en el horno durante 2 min, hasta que el queso se dore ligeramente.
Presentación:
Ensartar un arándano en un palillo y pinchar cada conjunto de la misma manera para que se mantengan unidos. Espolvorear con la guindilla picada y pimienta recién molida y colocar en una fuente.