Se llama Mónica Riley y es obesa. En la actualidad esta mujer pesa 337 kilos, pero no es suficiente para ella. Ella quiere pesar más, quiere llegar a ser la mujer más gorda del mundo, porque aunque parezca mentira, por ahora no lo es, y esta es su meta en la vida.
Actualmente Mónica tiene 32 años y vive en Texas. Ella lo asegura, lo tiene claro, tiene un sueño y va a luchar por conseguirlo, porque sabe que los sueños pueden llegar a hacerse realidad. Lo único raro aquí, tal vez y visto desde fuera, es el objetivo de su sueño.
El sueño que Mónica quiere conseguir es el de engordar más y más hasta ser la mujer más gorda del mundo. En la actualidad Mónica ya trabaja como modelo de tallas grandes, pero parece que para ella los 317 kilos no son suficientes.
No creáis que Mónica es una chica solitaria, no, Mónica no está sola en esta meta que quiere conseguir, ya que Mónica tiene pareja, y su pareja la apoya total e incondicionalmente en su lucha por se la mujer más obesa del planeta tierra, cómo nos gusta el amor ciego.
El plan es pesar 444 kilos y estar inmóvil, así me voy a sentir como una reina porque Sid estará esperándome y también está emocionado (…) es una fantasía sexual para nosotros y hablamos mucho de ello. Él ya tiene que ayudarme a levantarme del sofá y a salir de la cama.
Mónica se plantea llegar a pesar 444 kilos para romper el récord del mundo, actualmente pesa 317. La apoya su novio, que se llama Sid Riley y también es de Texas, él asegura que va a estar ahí con ella, luchando juntos para cumplir su tan querida y extraña meta.
No se cortan al posar juntos y enseñar las imágenes. Aquí la tenemos comiendo helado con su novio Sid Riley, el que la va a acompañar hasta el final, hasta esos 444 ansiados kilos. Saludable no será, pero si es su sueño, ¿qué vamos a decir nosotros? Ella realiza alimentación con embudo, y cuentan que la alimentación con el embudo para ellos es una experiencia completamente sexual y que tienen 20.000 fans que adoran verlos en este proceso.
Para lograr su meta Mónica come alrededor de 8.000 calorías diarias, todo pasó después de conocer a su pareja por Internet y en solo unos meses ganó 50 kilos. Sid, es el que cocina para ella y la alimenta todos los días para ayudarla a subir de peso. Sid incluso le prepara un batido especial que ella bebe con un embudo. El batido contiene 10 Pop Tarts, crema, helado y leche para ganar peso, haciendo un total de 3.500 calorías.
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