Reconócelo: usas tanto tu móvil que a veces te da miedo lo caliente que puede llegar a estar. Tranquilo, no llegará a estallarte en las manos ni tampoco se va a desintegrar. Pero sí es importante que sigas estos sencillos trucos para evitar que tu teléfono se sobrecaliente demasiado.
Si no lo haces, tu smartphone se resentirá. Aunque hay casos en los que el teléfono ha llegado a deformarse por el calor extremo, lo más normal es que lo notes en la vida de la batería, que se acortará de forma considerable y, aunque sigas estos consejos para alargarla, no te llegará más allá de unas horas.
Puedes cambiar la batería, pero si sigues usando tu teléfono mal, te volverá a ocurrir lo mismo. Así que lee atento.
CONSEJOS BÁSICOS
La temperatura que recomiendan los expertos para un smartphone es entre 0 y 35 grados. Un margen lo suficientemente amplio para evitar que te aparezca el tan temido mensaje en la pantalla: ‘La temperatura de tu teléfono debe disminuir antes de que pueda usarlo’. Quizás no te ha pasado a ti, pero créenos, ocurre.
Así que para empezar, lo básico: evita exponerlo al sol durante un largo período de tiempo, dejarlo dentro del coche en pleno verano, el uso prolongado del GPS, usar cargadores de baterías que proporcionen más corriente de la necesaria o el uso intensivo de juegos de calidad gráfica muy pesada.
¿Wi-Fi y Bluetooth permanentemente encendido? Si no lo necesitas, desconéctalos. Y sobre todo, déjalo descansar y apágalo de vez en cuando. Todos lo necesitamos, así que ¿por qué crees que ellos no? Y si además se está cargando, es mejor que evites usarlo a todos. No, no es un mito de nuestros padres. Es real.
¿Haces todo esto y tu móvil se sigue recalentando? Tranquilo, hay más soluciones.
BATERÍA DEFECTUOSA
Si tu móvil se sobrecalienta demasiado, piensa siempre en la batería. Aunque hay otros motivos, suele ser la principal responsable. Ya sea de fábrica o por un uso prolongado, debes cambiarla.
Puedes ir a ‘Estado de la batería’ y consultar ahí cómo se encuentra. Todo lo que aparezca en lugar de ‘Buena’ es mala señal. Si por ejemplo te sale ‘Estado desconocido’ lo mejor es que reinicies el teléfono y vuelvas a comprobarlo.
APLICACIONES EN SEGUNDO PLANO
El uso intensivo de alguna app puede acabar con la batería de nuestro móvil mucho antes de lo que crees. Muchas de ellas se ejecutan en segundo plano, así que igual no eres ni consciente de ello. Quizás no lo sepas, pero los fondos de pantalla animados, los widgets de tiempo, hora y fecha, los reproductores multimedia… todos ellos trabajan aunque tengas el smartphone bloqueado.
Para hacerlo, ve a Configuración>Aplicaciones y en el apartado de Batería podrás identificar que apps son las culpables de ello. Ciérralas o detenlas.
JUEGOS DEMASIADO EXIGENTES
Lógicamente, tu teléfono móvil no es un ordenador y no puedes ejecutar en él los mismos juegos. Aunque parezca evidente, a veces lo olvidamos. En las tiendas de apps encontramos juegos de calidad inimaginable para poder ser ejecutados en un móvil sin consecuencias.
Intentamos ejecutar juegos -o aplicaciones- demasiado exigentes que sobrecargará la CPU y consumirá toda la memoria RAM. En la medida de lo posible, evítalos.
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