Bueno, no sé si a alguien puede interesarle esta experiencia.
Después de probar varios monitores, creo que el mejor es un LG de 34’ (3440x1440) con dos conexiones Thunderbolt, varios USB3 y algunos conectores más.
En las conexiones del monitor (por la parte trasera) se conectan: teclado, trackpad, red, disco duro para TimeMachine, impresora, etc. Al MacBook Pro se conectan solo un cable thunderbolt desde el monitor y la alimentación (con imán).
El resultado es magnífico porque, si el ordenador está en reposo, o sea encendido y con la tapa cerrada, no hace falta abrirlo, se pone todo en marcha automáticamente, es decir, llegas del trabajo con tu ordenador con los programas a medio trabajar, solo conectas el thunderbolt y la alimentación y, sin abrirlo, tienes tu ordenador de sobremesa tal como lo dejaste, pudiendo trabajar con una pantalla panorámica en HD. Sin configurar nada, puedes trabajar además con las dos pantallas, duplicadas o continuas.
Muy buena forma de sacarle todo el partido posible a la potencia del MacBook Pro.
Aunque resulta un poco caro, creo que es la mejor opción para disfrutar de la portabilidad de un buen ordenador y de una base con gran pantalla donde, por ejemplo, da gusto trabajar con programas de edición de imágenes o de vídeos.