DIFICULTAD: muy fácil
TIEMPO: 10 minutos
INGREDIENTES para una persona:
• 1 taza de café fuerte recién hecho
• 1 cucharada y media de azúcar
• 35 ml de whisky
• 75 ml de nata para montar
ELABORACIÓN:
• Comenzamos poniendo el whisky en un cazo junto con una cucharada de azúcar y lo llevamos lentamente a ebullición, a fuego medio. Justo antes de que vaya a hervir, cuando comiencen las primeras burbujitas, lo retiramos del fuego y reservamos.
• Ahora debemos semi montar la nata, para ello la batimos junto con la media cucharada de azúcar con unas varillas, manuales o eléctricas, hasta que esté espesa y bien cremosa, pero sin llegar a estar firme.
• Ya sólo nos falta montar nuestro café, para ello ponemos el sirope de whisky que preparamos en el fondo de la copa que vayamos a utilizar, encima le ponemos la taza de café calentita y por último terminamos con la nata semi montada y ya podremos disfrutar de nuestro café irlandés recién hecho.
Lo ideal sería utilizar un whisky irlandés, pero puedes utilizar cualquiera que tengas por casa, incluso si no tienes whisky o no te gusta su sabor puedes utilizar coñac o cualquier otro licor que te guste, uno de avellana por ejemplo combinará genial con el café. De todas formas te animo a que lo pruebes con whisky, porque al estar caliente con el azúcar su sabor es delicioso, y ya al tomarlo todo en conjunto la combinación es riquísima.