5 consejos para que tus alimentos sean seguros e inocuos

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1. Ante todo, limpieza

Mantener la limpieza es el primero y más importante de los consejos. Debemos lavarnos las manos antes de preparar alimentos y durante su elaboración. Debemos lavar y desinfectar todas las superficies, cacharros y cuchillos que emplearemos a la hora de cocinar. ¡Ah!, y no debemos olvidar lavarnos las manos, siempre, después de ir al baño.

2. Alimentos crudos y cocinados... siempre por separado

Debemos separar los alimentos crudos de los cocinados. Guardarlos por separado en recipientes cerrados... es lo más sencillo para evitar el contacto. Además, aquellas herramientas que utilicemos, como cuchillos o tablas de cortar para tratar los alimentos crudos... deberán ser diferentes a los que utilicemos para el resto de usos.

3. La comida... bien cocinada

Es importante cocinar completamente los alimentos, especialmente la carne, el pollo, los huevos y los pescados ya que una cocción correcta mata casi todos los microorganismos peligrosos. Dejas que hiervan las sopas y guisos es la mejor forma de asegurarnos que han alcanzado los 70°C... la temperatura que garantiza la inocuidad de los alimentos. Además, hay que recalentar completamente la comida cocina, para asegurarnos de matar cualquier microorganismo que pudiera haberse desarrollado durante la conservación.

4. O frío o calor... pero nunca a temperatura ambiente

No debe dejarse a temperatura ambiente alimentos cocinados durante más de 2 horas. O bien se mantienen calientes (por encima de los 60°C) o bien se refrigeran cuanto antes. También debemos evitar la temperatura ambiente para descongelar un alimento ya sea crudo o cocinado... es mejor descongelar dentro de la nevera, en agua fría o en el microondas. En general, no debemos conservar comida durante mucho tiempo... ni siquiera en el congelador.

5. Agua limpia y materias primas seguras

Un gesto tan simple como lavar y pelar... puede reducir mucho los riesgos. Eso sí... de nada sirve un lavado si se hace en agua que no esté tratada. Hay que optar siempre por materias primas seguras, es decir, alimentos sanos y frescos, que no estén estropeados o podridos. También hay que elegir alimentos ya procesados para su inocuidad, como por ejemplo la leche pasteurizada, y no consumir alimentos caducados.

Con esta película animada, la Organización Mundial de la Salud quiere explicar estas cinco claves para la inocuidad de los alimentos a los consumidores... para que todos las apliquemos en casa.